Toda una experincia

El primer día estuvo soleado y pensamos que la caminata había sido dura, esto fue hasta el comienzo del día 2, ahí nos dimos cuenta lo que una caminata dura era realmente y para completar llovió torrencialmente desde la mitad de la caminata, llegamos al campamento empapados y agotados por suerte nos estaban esperando con unos ricos y calientes mates de coca. El tercer día comenzó sencillo y si bien el camino no fue empinado la duración de la caminata nos dejo muy cansados. El cuarto día nos despertó con lluvia y la llegada a la puerta del Sol no se pudo apreciar en todo su esplendor, pero Machu Pichu es maravilloso incluso con lluvia.